Fue un error garrafal del inspector que no debe volverse a cometer, acertó a decir el director de Desarrollo Urbano, Heyden Cebada Ramírez, sobre la clausura de los aireadores en la laguna Bojórquez que sacó a la luz Novedades de Quintana Roo. Hubo una queja verbal de locatarios de la Plaza Terramar, sin embargo no había motivo para la clausura, se trató de una mala comunicación del inspector Luis Sosa con la central, lo que ameritó una sanción administrativa, ya que es la primera vez que algo así le ocurre, dijo. Los sellos van ha ser retirados y los aireadores podrán iniciar su operación en cuanto dé luz verde la Comisión Federal de Electricidad (CFE), y así lo determinen los ingenieros encargados del proyecto. El titular de Desarrollo Urbano reconoció que "fue un error grandísimo del inspector, pasa en todas las familias, pero ya se procedió a retirar los sellos. Se recibió en la dirección una queja de Terramar, pero ahí si la regó el inspector. La queja era de una obra que se estaba haciendo sin permiso". Ahora el área administrativa, dijo, está viendo qué es lo que procede, porque no está bien, la obra tiene todos sus papeles, sobre todo porque se está realizando en zona federal, entonces es un error garrafal que no tuvo que haber sucedido. Cebada Ramírez indicó que de acuerdo al procedimiento administrativo, la primera falta de este tipo amerita una llamada de atención y si son ya varias veces, puede haber suspensión, sin embargo en este caso es la primera ocasión que ocurre."El inspector portaba un equipo de radio con el que debió comunicarse con la central para pedir información, como se hace cuando se procede a realizar una visita, no obstante en este caso en ningún momento el inspector lo consultó. El director de Desarrollo Urbano precisó que en estos momentos se realizan operativos de inspección, y durante la presente administración se han llevado acabo 49 mil acciones de esta naturaleza.Y es que en una de las estructuras superficiales ubicadas a la orilla de la laguna, frente a Plaza Caracol, fue colocado un aviso con fecha del primero de febrero del 2008 en el que se advierte que después de no encontrar a nadie se procedía a levantar el acta de clausura. De acuerdo al documento que fue colocado sobre el frente de la estructura, la clausura se realizó por no tener permiso para realizar dicha obra e infringir los artículos 54 y 55 del Reglamento de Construcción municipal vigente. Después de las declaraciones del director de Desarrollo Urbano, Novedades de Quintana Roo pudo confirmar que los sellos habían sido retirados, por lo que de acuerdo al responsable de la obra, Wolmert Souza, sólo es cuestión de la CFE dé luz verde para comenzar a trabajar. A mediados de diciembre la empresa comenzó los trabajos físicos en el área de la laguna Bojórquez para instalar el sistema de aireadores con los que se busca oxigenar el cuerpo de agua y con lo cual iniciaban los primeros esfuerzos para rescatar el cuerpo lagunar. La licitación y trámites de permisos se realizó a través de la Dirección de Ecología a cargo de la bióloga Reyna Gil Hernández. La funcionaria explicó que se obtuvo de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) la excepción de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), para remodelar el proyecto.Sobre la clausura Reyna Gil aseguró que se trata de un error, ya que al encontrarse en zona federal Desarrollo Urbano no tenía injerencia El representante de la empresa Energía Solar -que ganó la licitación para realizar la obra de 900 mil pesos- comentó sobre la clausura que no había nadie en la obra cuando llegaron los inspectores: "fue un mal entendido pero ya todo se arregló”.
Fuente: Novedades de Quintana Roo
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